Ezequiel se encontraba estudiando informática en Jujuy cuando se entera de que una compañera de su clase no escuchaba bien. Empieza a experimentar con la audición de su amiga y descubre de que, en realidad, su amiga sufría de hipoacústica solo a ciertas frecuencias sonoras pero no a las otras. Desarrolla entonces un software que cambia las frecuencias sonoras recibidas por aquellas que su paciente podía escuchar, y, colocando este programita en el celular de su amiga y usando el micrófono de su celular para captar el sonido original y los audífonos del mismo para escuchar los cambios, su amiga empezó a oir perfectamente al maestro. Con ese logro, Ezequiel envía su gran invención a un concurso que ofrecía el MIT, donde recibe el primer premio internacional, y de esa manera Ezequiel inicia su carrera informática, hoy con su propia empresa especializada en sonido y con un contrato con Samsung.
Es simplemente otra prueba del lo que ocurre en Jujuy!
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